Descubre nuevas formas de resolver tus problemas de la mano del oso más tierno y perezoso de Disney.
Winnie Pooh tiene un estilo muy particular para resolver problemas y tomar decisiones. Si decides aplicar sus ideas a tu vida, aquí tienes una guía que podrá ayudarte. Recuerda, cuando tengas dudas, pregúntate qué haría él y trata de ser tan Pooh como él lo sería.
Sigue durmiendo. La cama es cómoda, tú estás cómodo. Tiene sentido.
Siempre ayuda a un amigo en apuros. Puedes comerte su miel, pero también ayúdalos.
Hazte amigo de la naturaleza.
Descubre lo que te gusta y pégate a ello… lo cual es muy sencillo porque la miel es más que pegajosa…
Hacer varias tareas a la vez puede perjudicar tu eficiencia. Si vas a ponerte a pensar, toma asiento, no te vayas a lastimar.
Cuida tu pancita. No hay necesidad de que se inquiete, tú bien sabes lo que quiere.
Conoce tus carencias. Si eres un oso con un cerebro pequeño, dilo. No es necesario que pretendas saber lo que significan esas palabras tan largas que existen. Búho podrá ayudarte.
No actúes sin tener un plan. No es necesario que sea bueno, pero tener un plan es mejor que no tener ninguno.
Sigue a tu panza. Especialmente si ella está guiándote al desayuno y mucho más si ese desayuno es miel.
Anuncia tus esfuerzos. Si te pasó algo muy importante en el bosque y nadie más lo sabe, ¿pasó de verdad?
No te preocupes tanto. ¡Relájate!
No entres en pánico. Siempre intenta dar lo mejor en cada situación.
Enfatiza tus opiniones con tus cejas. Te hará ver más confiable.
Por último: encuentra tu pasión y sumérgete en ella. Literalmente, figurativamente y deliciosamente.
Ya sabes, cuando tengas un problema, ¡tomar el ejemplo de Winnie Pooh puede ser una gran opción para resolverlo!